Algunos expertos consideran que el sector del comercio electrónico es un puente entre la digitalización y la transición hacia una economía más sostenible. Con una tendencia clara y global hacia el comercio omnicanal, las empresas tienen la oportunidad de encontrar la mejor combinación de soluciones para implementar modelos accesibles, asequibles y sostenibles. Además, el comercio electrónico ofrece una oportunidad única para repensar cómo dar una segunda vida a los materiales y bienes secundarios mediante la logística inversa y una ampliación del mercado de productos reacondicionados o de segunda mano
Según datos de AECOC, el 80 por 100 del impacto ambiental generado por los envases del comercio electrónico se puede reducir en la fase de diseño con un modelo adecuado y sostenible para el embalaje.
Varios son los sistemas recomendados de embalaje para hacer los envíos medioambientalmente sostenibles, y son ya alternativas a los embalajes tradicionales de plástico los productos hechos con materiales 100 por 100 reciclables, como el cartón. Un ejemplo, conocido ya por muchos consumidores, son los estuches de cartón para enviar libros y otros productos planos. Para realizar envíos de electrodomésticos pequeños, se recomiendan las cajas automontables, sin descartar otro sistema de embalaje reciclable, quizá más desconocido por los usuarios, como son los sistemas de relleno de papel.
Muchas compañías distribuidoras de comercio electrónico ofrecen la posibilidad de hacer devoluciones, porque los clientes se sienten más cómodos a la hora de comprar por internet si saben que existe esta opción. Y para ello, una de las apuestas más novedosas está siendo la caja con doble precinto adhesivo y solapa de cartón. La tecnología de esta caja de cartón permite volver a usarla después de haber sido abierta.
Para los productos textiles, uno de los sectores que más está triunfando en el mundo de las ventas online, proliferan ya los sobres de envío con solapa adhesiva biodegradable.
Se trata de una de las prácticas del packaging sostenible en el comercio electrónico. Los sistemas de ajuste al producto utilizan pliegues corrugados suministrados en varios anchos y calidades, que pueden imprimirse de manera personalizada para satisfacer los requisitos del usuario en su centro de distribución una vez que se haya recibido el pedido.
Para evitar que el contenido se mueva dentro de una caja también se pueden emplear patrones de inserciones troqueladas. Estos están creciendo en popularidad, ya que permiten mostrar de manera atractiva los contenidos en la apertura. Estas inserciones troqueladas pueden ser de color marrón o blanco, y las impresoras de inyección de tinta permiten imprimir copias cortas con identidad de marca o personalizadas con información específica del producto. Otras opciones incluyen recubrimiento por inundación en un color complementario o en contraste, reduciendo los costes y obteniendo colores vibrantes que generan impacto en el destinatario, especialmente si se utiliza un solo color de borde a borde.
Y otra opción sostenible para los embalajes, muy utilizada por el comercio electrónico de cosmética, son los chips de relleno biodegradables. Se trata de virutas o bolitas 100 por 100 compostables, fabricadas con almidón de maíz, perfectas para separar y proteger productos delicados, y que se disuelven completamente cuando entran en contacto con el agua.
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